Para la población del “Cerro cubierto de Hierba” o “La tierra de las flores”, transcurridos 141 años de habérsele conferido el establecimiento de su institucionalidad municipal (1,882) y a muchos años que tomara posesión Camilo Oliva, como el primer alcalde de este municipio, recién se dio el banderazo de salida para vivir un “nuevo” proceso electoral que elija a nuestras autoridades municipales.
En la actualidad la policromía de interesados en ser el sucesor de Oliva en la historia sanjuanera, suman 24 las “ofertas” de candidatos para las dos áreas de incidencia electoral de nuestro municipio.
Vestidos con nuevos colores, banderas y símbolos, doce dentro del grupo, intentan convencer al electorado de su estreno en el mundo político sanjuanero como los “nuevos rostros”, pero de costumbres, hábitos, intereses e intenciones desconocidas, muchos de los candidatos no saben a que se meten, no están preparados, no tienen los recursos y mucho menos liderazgo, ellos mismos saben que no tienen posibilidades pero aún así deciden participar.
Al referirnos a hábitos, intereses e intenciones desconocidas el principal objetivo es traer a discusión el de uno ampliamente conocido, como lo es Juan Carlos Pellecer, quién aspira a ser reelecto, a pesar de los fuertes señalamientos en su contra.
El proceso electoral, cómo en otras épocas y en voz de integraciones cómo La Misión de Observación Electoral de Guatemala (MOE-Gt), la más creíble o limpia en reputación, cómo para ser tomada en cuenta por este medio de comunicación, ya indicó que el proceso se encuentra teñido por diversos señalamientos con un foco común: la corrupción, el tráfico de influencias en especial en el ámbito judicial, sin olvidar las perversas alianzas partidistas.
Siguen y seguirán existiendo una vez siga importando poco al pueblo sanjuanero, el triste hábito de los “tres monos sabios”, “No ver nada, no escuchar nada y no decir nada” el peligro de la reelección de Pellecer Agustín es evidente en la compra de voluntades, de finiquitos, de indiferencia e irrespeto de la norma jurídica, la prepotencia de su administración y la desfachatez al cerrar los ojos y voltear el rostro hacia otro lado cuando se le cuestiona, las particularidades y acuerdos bajo la mesa, que también han sido su sello personal.
En el listado de los 24 hay nombres, cuya trayectoria también han estado bajo la mira de similares escenarios de escarnio público, pero exhortamos que no se debe olvidar o ignorar que pesa sobre Juan Carlos Pellecer, realidades de las promesas incumplidas y un sinfín de ilegalidades.
En principio el incumplimiento del surtido de agua potable y sospecha de enriquecimiento ilícito a través de la venta de este producto; la alianza con la corrupción del Gobierno Central y el partido VAMOS, sin duda el partido más corrupto en toda la era democrática del país y que le permitió contar con un presupuesto aumentado sí, pero, sin resultados reales y de beneficio para la población: ¿Qué se hizo o ha hecho ese dinero?
Seguimos la lista con su astucia para burlar la ley y neutralizar dos solicitudes de antejuicio en su contra o bien, ser parte de un grupo de políticos señalados por la administración de los Estados Unidos de Norte América por corrupción, narcotráfico y tráfico de armas de fuego internacional, sin olvidar la sombra del crimen organizado a través de la figura de los patrulleros.
¿A quién elegir entonces? Invitamos al electorado, que se presume representarán a más de 280 mil sanjuaneros, que piensen por ellos, ya que con su voto determinarán el rumbo del futuro para las generaciones en San Juan Sacatepéquez, un municipio urgido de soluciones a sus problemáticas, no promesas ni discursos falaces, típicos de la política tradicional.
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