Lesly Maribel Locón Sabán competidora del evento de belleza “Flor Sanjuanera” en San Juan Sacatepéquez, renuncio a su participación debido a actos de discriminación y racismo. Lesly tomó la difícil decisión de abandonar el evento por su bienestar emocional, tras experimentar una falta de apoyo por parte de los organizadores.
La Casa de la Cultura, responsable de la organización del evento, ha sido señalada como cómplice de estos actos de discriminación. “a través de sus redes sociales permitieron comentarios ofensivos y humillantes hacia su persona” sin duda la institución no tomó las medidas adecuadas para proteger su integridad emocional y tampoco hizo frente a la situación de manera efectiva.
El encargado de moderar y gestionar los comentarios en línea, no hizo casi nada para contrarrestar la ola de discriminación y racismo, aunque indicaron que filtrarían comentarios, el acoso nunca paró . La gran cantidad de perfiles falsos no fueron controlados, sino que se les dio libertad para que sus mensajes llenos de odio menoscabaran el temple de la joven concursante.
La situación llegó a su punto crítico cuando Lesly presentó su renuncia formal, revelando los motivos detrás de su partida y fue hasta dos días después que La Casa de la Cultura emitió un comunicado informando sobre la renuncia, pero sin reconocer la gravedad de los actos.
Esta falta de compromiso por parte de los organizadores ha generado una gran controversia y ha planteado interrogantes sobre su responsabilidad y sensibilidad hacia las participantes, la población exige una respuesta clara por parte de La Casa de la Cultura, que ha guardado un silencio hermético, por lo que establecimos comunicación vía WhatsApp con la presidenta de la Junta Directiva, a quien se le preguntó sobre la postura de la casa de la cultura ante los señalamientos, pero ya no respondió a nuestra interrogante.
Este lamentable episodio ha puesto de manifiesto la necesidad de tomar medidas concretas para prevenir y abordar la discriminación y el racismo en eventos culturales. La Casa de la Cultura y otras instituciones involucradas en la organización de eventos similares deben asumir la responsabilidad de salvaguardar la integridad no soló física sino también la emocional de las participantes, así como fomentar un entorno inclusivo y respetuoso para todos.
La cancelación del evento hubiera servido como un recordatorio contundente de lucha contra la discriminación y el racismo, pero no fue el caso, y la Junta Directiva solo polarizo el tema, no respondiendo y sin ningún pronunciamiento cuando se les cuestionó. Es fundamental que las instituciones y las personas se unan para promover la diversidad, la igualdad y el respeto mutuo en todas las comunidades.
Además, se intentó obtener un acercamiento con la organización de derechos humanos AGIMS, una organización de mujeres que busca disminuir la discriminación y exclusión que viven las mujeres en San Juan Sacatepéquez, para establecer si procede un acompañamiento legal y psicológico, pero no se pudo establecer comunicación.
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