Al abordar el presente tema resulta difícil decidir si se plantea por la cantidad de familiares directos o aquellos consecuencia de una noche de copas, compadrazgo, amiguismo o “pago de deuda política” o el rosario de delitos en que incurre y ha incurrido la actual administración del alcalde Juan Carlos Pellecer.
No alcanzan los dedos de las manos y los pies para hacer la cuenta de los favorecidos a través de la violación de la ley. Desde hermanos, sobrinos, cuñados, ex cuñados, novias, ex novias que, se encuentran en la nómina de empleados municipales de Pellecer.
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El Nepotismo cómo práctica delictiva, cobra acción penal a través de delitos cómo: abuso de autoridad, abuso de poder, nombramientos ilegales, tráfico de influencias. Figuras contempladas en el Código Penal (Decreto Número 17-73 y sus reformas) y la Ley de Probidad y Responsabilidad de los Funcionarios y Empleados Públicos (Decreto 89-2002), solo por citar algunas leyes en las que se aborda “el trato de favor hacia familiares o amigos, a los que se otorgan cargos o empleos públicos por el mero hecho de serlo, sin tener en cuenta otros méritos”.
¿Evidencias? Le suenan estos nombres: EULO ALEXANDER HERNANDEZ AGUSTIN, WUILSON ELIUD HERNANDEZ AGUSTIN, SARONI CARRERO HERNANDEZ AGUSTIN y ERICKA YOMARA HERNANDEZ AGUSTIN, LUIS AMADO NÁJERA AGUSTIN, y podemos continuar con una larga lista de amigos y familiares con salarios “u honorarios” que van desde los Q6 mil a Q20 mil mensuales por “cargos o funciones” de supervisores, técnicos, asesores y operadores en los servicios públicos.
Lo cierto es que en la historia de la administración municipal de San Juan Sacatepéquez, no es un fenómeno nuevo, ni descubrimos el agua azucarada. En igual forma han procedido los antecesores de Pellecer pero, no de forma tan descarada, irrespetuosa, ilegal, anti ética y anti moral -¿la tendrán?- y que nos hace recordar un slogan de otro grupo que hizo gobierno en el país: “mi familia progresa”, ¡sí!, ¡la de los verdes, la de ellos!
Pero, si es una verdad en boca de los sanjuaneros, ¿por qué no ha prosperado nada en su contra? La respuesta es simple: tráfico de influencias, compadrazgo, compra de voluntades –la de Pellecer a cambio de millonarias transferencias cuyo destino, cual si fuera un “EXPEDIENTE X”, no ha podido ser revelado más allá de un grisáceo indicio de enriquecimiento ilícito, del grupo que hoy nos gobierna- al asociarse a la corruptela enquistada en el Palacio Nacional, Casa Presidencial, Congreso de la República, Organismo Judicial y Corte Suprema de Justicia.
“Creada la ley, creada la trampa”, reza el dicho en el mundo legislativo y, para que vean que no se es ignorante compartimos el escenario jurídico: “…el conflicto de interés y el nepotismo no son delitos por sí mismos, sin embargo, pueden conducir a acciones que se encuadren en delitos como el Abuso de autoridad, Nombramientos ilegales, Tráfico de influencias, entre otros contemplados en el Código Penal, Decreto Número 17-73 y sus reformas y que prohíben la contratación de familiares desde la esposa, hasta los tataranietos.
El artículo 28 del Código Penal dicta: “Los funcionarios o empleados públicos que, abusando del cargo del que están investidos, cometieren cualquier delito, serán sancionados con la pena correspondiente al delito cometido, aumentada en una cuarta parte (Decreto Legislativo 31-2012; Ley Contra la Corrupción), sin olvidar la Ley de Probidad y Responsabilidad de los Funcionarios y Empleados Públicos y su reglamento, la Ley 26771)”.
Amigo, amiga, esta radiografía, de las muchas que pueden hacerse públicas sobre la actual administración ¡por favor!, ¡debemos buscar el voto consciente, razonado, analizado. ¡Un voto responsable que permita conceder la responsabilidad de la administración de nuestra comuna, a gente proba, no viciosa, no amañada, no corrupta!
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